domingo, 31 de mayo de 2015

TANTO TANTO...




TANTO TANTO...

Hoy estuve contigo, al llegar a tu casa no estabas, habías ido a Xanadú, a tu curso de Snowboard en la nieve, haces tantas actividades que si quiero verte voy al circuito a verte montar en la moto, y a sufrir mientras lo haces.

Hoy llegaste cuando yo había comido en tu casa, me diste un abrazo enorme, y mi corazón salto de gozo, sabes, a veces me duele el corazón de lo mucho que te quiero, te aprieto junto a mi pecho, y empiezo a soñar contigo aunque este despierta y te tenga a mi lado.

Cuando has llegado has empezado con los deberes, y tu sola, en tu habitación has pasado allí la tarde, solo te he visto cuando yo me marchaba, me has dicho algo precioso, y casi lloro al escucharte mi chica mágica y maravillosa, yo te he dicho que yo de todo más, te has reído igual que lo hace tu padre, y mi amor se ha extendido por la habitación junto a mi mirada.

En ciertos momentos eres solo mía, porque tú y yo lo queremos así, nadie entra en nuestro mundo, y compartimos minerales, y meteoritos, miramos cosas en internet juntas, paseamos por la playa, te peino de mil formas diferentes, yo me pongo loca haciéndote fotos, y sé que a nadie querré mas de lo que te quiero a ti, mi bella Andrea.

viernes, 22 de mayo de 2015

UNA LLAMADA...




UNA LLAMADA...

Me llamo tu padre, y hablando con el me dijo… Andrea quiere hablar contigo ahora, después…

Se puso al móvil enseguida, su voz cantarina me dijo ¿hola abuela, como estas? Mi corazón salto de alegría al oír su voz maravillosa, su risa de niña, y sus preguntas de adolescente feliz.

Solo hizo falta eso para que mi dormir fuese sereno, lleno de sueños de hoy, sin soñar con el ayer que ya se fue, y sintiendo en mi pecho la dulzura que ya había casi olvidado.

Hoy en día con tantos frentes abiertos en mi vida triste, una cosa sencilla me anima lo suficiente para dormir de un tirón, y levantarme feliz como si el mundo girase sin problemas.

Espero su llamada, volveré a sonreír con ella, y siempre mi corazón será de Andrea.


martes, 5 de mayo de 2015

NADA SE DETIENE




NADA SE DETIENE

Hace unos años, frente a la puerta de mi casa, en el jardín, plantaron un arbolito que me pareció precioso, parecía un abeto, pero no lo es, su color verde de hojas perennes daban color continuo al  jardín incluso en el crudo invierno que todo lo deja en reposo.

El día que plantaron ese árbol verde y de puntas amarillas en sus ramas, yo hice unas fotos a mi nieta, y el tiempo paso sin más importancia hacia ese árbol.

Hubo uno temporada que sentí que moriría, que no sé porque sus puntas doradas empezaron a ponerse marrones, había perdido el brillo, y su crecimiento se paro, pero quizás no fue el crecimiento del árbol lo que paro, si no el mío.

Mi nieta dejo de venir a casa, empezó la guardería, y después venia algún fin de semana, y es verdad que las cosas cambian, y sin darme cuenta me olvide del árbol, de los días que ella llenaba toda mi vida, y eso es un atraso, porque cuando dejo de venir mi vida se quedo en casa, y la calle sobraba para mí.

El otro día que mi marido y yo salimos a la óptica a graduarse el la vista, al volver, me di cuenta de cómo había crecido el “arbolito” que ya había dejado de serlo, es un hermoso árbol que conserva su belleza, y ya cubre las terrazas de los vecinos de en frente, y es que la vida ha pasado deprisa.

Me pare que hice fotos del ahora para compararlo con el ayer y… las dos fotografías son hermosas, las dos solo tienen el paso del tiempo, han pasado nueve años, las dos me hacen pensar que todo mereció la pena vivirlo, y que nada se detuvo cuando yo encerrada en mi casa deje de vivir, por eso quiero volver a mis días de sonrisas, a mis ojos azules de cielo o mar intenso, y mis adentros sacarlo hacia fuera, es el momento, lo necesito.