Yo andaba por entonces libre como el viento, mi vida era mía, y compartía a ratos pensamientos y sentimientos con los más cercanos.
Y entonces llego a mí un sueño, y fue mi vida durante un tiempo, comíamos, y nos bañábamos juntas, dormíamos abrazadas, y dejamos de soñar por que lo teníamos todo.
Se convirtió en mi sombra, ni un paso iba sin su compañía, nuestras manos siempre juntas, nuestros latidos al unísono, nuestro despertar y nuestros días, solo formaban parte de nosotras, y creo que no éramos conscientes de otras cosas.
Después de un tiempo, ella se marcho, y empezó a soñar sola en su cuarto, y en su cuna, me dejo las manos libres y el corazón desolado, y volví a soñar solo con abrazarla, y la distancia fue mas grande cuando apenas venia a verme.
Pero el tiempo todo lo cura, y no pude hacer nada, y todo volvió a mi despacio después de un tiempo, y cuando llegan las vacaciones, ella, mi pequeña mariposa vuelve a casa, y allí en la playa, se reproducen los sueños, y como grandes olas llegan sus abrazos y sus risas, y a nuestros corazones vuelve el rojo atardecer de tiempo atrás, cuando fui abuela por vez primera, y ella se convirtió en mi sombra.
¡Qué belleza, Lola querida!
ResponderEliminarLa realidad de la vida: amar, amar y amar sin esperar algo a cambio. Me has hecho añorar; lo bueno es que ellos estén felices, aunque sólo podamos darles un abrazo virtual por el Skype :)
Un fuerte abrazo lleno de luz y esperanza
Si que los echamos de menos muchas veces, pero así es la vida... Gracias por tu comentario. Un beso.
ResponderEliminarEs precioso lo que cuentas, mi querida Lola: Los hijos son de sus padres y nosotras nos encariñamos demasiado con ellos; y a veces hasta los malcriamos, pero es así o así somos los abuelos y cuando no los tenemos cerca que mal lo pasamos!!!! Pero el caso es saber que están bien de salud y felices.
ResponderEliminarHa sido un inmenso placer pasar a leerte.
Escribes sentimientos que llegan con agradables mensajes.
Te dejo mi gratitud y mi estima.
Un abrazo y feliz semana.
Perdón, delos hijos... y quise decir los nietos.
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