EN VERANO...
Pasamos el verano juntas, primero con sus hermanos, después llegaron
sus padres.
La sentí totalmente cambiada, había veces que nada teníamos que
decir, ella siempre con su libro electrónico, leía y leía cómodamente tumbada
en mi sofá de la terraza, entonces yo sentada enfrente la miraba sin que me lo
notase y yo misma me repetía… como ha crecido, como aumenta mi cariño al verla,
tan parecida a mí a su edad.
Nos gusta hablar, a mi me gusta que me pregunte cosas de sus
estudios, me gusta poder sacarla de dudas en cualquier ocasión que ella me
pregunte, pero sobre todo me gusta que me pregunte la historia que esté
estudiando en esos momentos.
Este año más de una vez me enfade al ver que no recogía, que
da igual que haya armarios nuevos donde guardar la ropa, porque el orden no está
en sus días, y ella dice que es feliz sin organizar nada, será cosa de la
juventud, o solamente el desorden no desordena su mente…
Ha sido un verano demasiado caluroso, a veces se que me paso
con el orden, por eso creo que ya no le gusta venir a casa por vacaciones, y
eso a veces me pone triste, pero lo peor es ver como riñe con sus hermanos, me
duele, será que ya olvide que yo hacía lo mismo.
Mi niña Andrea pronto cumplirá 14 años, soy feliz de verla
resuelta y sabiendo lo que quiere, ahora solo hay que esperar ver como realiza
sus sueños, con tiempo y ganas.
Te quiero Andrea.